Eduardo Celmi Camavinga (Cabinda, Angola; 21 años) avisa a su familia de que enseguida sale para casa. Lo hace a través de un mensaje de audio en francés, aunque no tiene problemas en pasar al castellano, con el que se maneja con soltura después de dos años en España. El centrocampista es uno de los símbolos del Madrid que quedará tras la retirada de Toni Kroos. Jóvenes como él asumirán más peso en el equipo cuando pase la final de la Champions de este sábado contra el Dortmund. Después de ser suplente en las semifinales ante el Bayern, el galo apunta a la titularidad en Londres, beneficiado también por la lesión de Aurélien Tchouameni. Contestaciones rápidas, ágiles y directas de un tipo, a menudo, sonriente.
Pregunta. Es su segunda final de la Copa de Europa en tres temporadas en el Madrid. ¿En qué ha cambiado Camavinga?
Respuesta. Soy un poco más maduro, tengo más barba (risas) y mi tipo de juego ha cambiado algo. Tengo más calma y también juego un poco más.
P. ¿Cómo se adquiere más calma?
R. Cuando miras a Toni [Kroos] o Luka [Modric], solo debes hacer como ellos, que tienen mucha tranquilidad en todas las partes del campo.
P. ¿Es lo que más ha aprendido de ellos?
R. También la calidad de pase de Toni. Y hablar menos, como él, porque es una persona que no habla mucho, pero cuando lo hace, te mata. Y eso me gusta mucho de él.
P. ¿Se aprende a hablar menos?
R. Yo no soy así, pero cuando uno es más maduro, hablas menos. Eso se aprende.
Kroos no habla mucho, pero cuando lo hace te mata. Eso me gusta de él
P. En esta transición generacional, Ancelotti siempre ha pedido la comprensión de los veteranos y la paciencia de los jóvenes. ¿Usted cómo ha llevado eso?
R. Yo soy paciente, pero no mucho. Porque en mi vida las cosas han venido muy rápido, pero también hay que tener paciencia. A veces, es la llave, aunque los jóvenes no estamos acostumbrados a tener mucha porque todo nos ha venido muy deprisa. Pero en el fútbol hay que tenerla.
P. ¿Ha debido cambiar el chip?
R. Sí, lo he tenido que hacer. El primer año no jugué mucho y quiero jugar mucho. Cuando no lo hago, no estoy contento. Es normal. Pero debo tener paciencia. Eso es algo que el míster me ha pedido mucho también.
P. ¿Ha tenido muchas charlas con Ancelotti sobre esto?
R. Soy joven. La paciencia es la vida, eso es verdad.
P. ¿Ha sido como una lección de vida?
R. El fútbol es una cosa de tiempo. Hay cositas que no tienes que forzar porque cuando lo haces, puede que no salgan bien. Y si has tenido paciencia, puede que sí salgan. No tengo paciencia, pero es la llave de la vida, creo. En la vida, en general, no he tenido paciencia, pero en el fútbol debo tenerla.
P. ¿En qué cree que debería mejorar en el campo?
R. En la concentración cuando no tenemos el balón. A veces, miro los partidos y me pregunto por qué no fui a ahí, por qué no hice eso…
P. ¿Se estudia mucho?
R. No me veo muchas veces porque me gusta dormir (risas), pero a veces sí.
P. ¿Y qué considera que hace muy bien?
R. El tackle. Pero también tengo cualidades con el balón. Sé driblar y la gente no lo sabe. Cuando lo hago, la gente dice: guau. Pero no es guau, porque yo sé hacerlo. La gente me ve más como alguien defensivo, pero yo también tengo esa cualidad. No lo hago mucho y la gente piensa que no puedo, pero sí.
P. ¿Lo hacía mucho de niño?
R. Sí, era goleador, un diez. Ahí driblaba mucho. Pero en el Rennes, no sé por qué, me pusieron a defender. No sé por qué.
P. ¿Nunca se lo explicaron?
R. No sé. Cuando era más joven, era más atacante y metía más goles. Pero en la cantera empecé en el medio del campo. Tenía que defender más, recuperar más balones. A mí no me gustaba defender, y ahora lo hago.
La gente me ve como alguien defensivo, pero yo también sé driblar
P. ¿Le ha cogido placer a defender con el paso del tiempo?
R. Ahora me gusta mucho.
P. ¿Qué es lo que más le pide Ancelotti?
R. Cuando tengo el espacio, ir con el balón hacia adelante.
P. El otro día también le pidió bailar en Cibeles.
R. Surgió natural, por eso me gustó. Era el deseo del míster y yo solo tuve que hacerlo.
P. ¿Cuál va a ser su papel a partir de la próxima temporada sin Kroos?
R. Sin Toni, será diferente. Los jóvenes, y yo también, jugaremos más. Tengo que focalizarme en mí, en mi fútbol. Pero seguro que el Madrid sin Toni no será igual. No hay dos como él.
P. El otro día Ancelotti dijo que los jóvenes tendrán que asumir más responsabilidades.
R. Es normal. Cuando juegas para el Madrid, seas titular o no, tienes responsabilidades porque en el campo no hay jóvenes ni mayores. Debes jugar bien.
P. ¿Se ve preparado para tener más peso en la salida de balón?
R. Sí, claro. Yo también puedo hacer eso. Todos los jugadores aquí pueden tener responsabilidades. Cuando juegas aquí, ya hay mucha presión de fuera.
P. ¿Qué le aportó la temporada pasada jugando muchos meses como lateral izquierdo?
R. Ahora tengo otra visión del fútbol porque, cuando le doy el balón al lateral izquierdo, sé qué se piensa y cómo en esa posición. Hay balones que no son fáciles para ellos. Hago las cosas para que estén bien. Si se la paso, tengo en cuenta si puede ser complicado para ellos.
P. ¿Cómo fue la adaptación a ese puesto? ¿Habló con otros laterales, vio vídeos, pidió consejos…?
R. Ferland [Mendy] me ha ayudado mucho para saber cómo tengo colocar el cuerpo. Le tengo que agradecer los consejos.
P. ¿En algún momento se vio como lateral para siempre?
R. No, nunca, nunca. Yo no soy lateral izquierdo, soy centrocampista. Aunque si es para ayudar al equipo, lo voy a hacer.
P. ¿Cuántos partidos ha visto del Dortmund?
R. Cinco o seis. Va a ser una final complicada porque tienen calidades, sacrificio e historia. Si tienes historia, juegas con el corazón y, si juegas con el corazón, es más complicado.
P. ¿Teme el favoritismo máximo?
R. Vosotros decís eso. Seguro que el Madrid siempre es favorito en este tipo de partidos porque tiene más costumbre, pero en el campo todo puede pasar.
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