Noelia Valls, más conocida en redes sociales como Mistrillis, es creadora de contenido y madre de familia numerosa. Reconoce que su historia sorprende a todo el mundo cada vez que cuenta que tuvo trillizos hace cuatro años. «¿Fue natural?», suelen preguntarle. «Sí», responde ella. Fue una triple ovulación espontánea. Según la Sociedad Española de Fertilidad (SEF), la ovulación múltiple representa el 1-2 % de todos los embarazos en España.
«Sentí que la piel de mi abdomen se rompía. Literal», confiesa en esta entrevista con ABC. Y es que Noelia ha contado y mostrado sin tapujos a sus seguidores (acumula en Instagram, TikTok y Youtube más de 180.000) cómo se quedó su abdomen tras dar a luz a los trillizos. Algo poco común teniendo en cuenta que en las redes sociales parecen sólo existir ‘cuerpos perfectos’, incluso poco después de dar a luz.
1. Noelia, lo primero, ¿qué tal ha ido el verano con tres peques? No sé si estás agotada y ellos siguen con las pilas a tope, si estás feliz de que empiecen el colegio …
El verano muy bien. Intentando aprovechar a tope para hacer actividades y que se lo pasen bien. Y sí, estoy agotada… Me encanta la rutina y el día a día aunque me da algo de pena volver a los horarios, madrugones, virus, resfriados, más virus, frío y más y más virus (ríe). Parece ser que en casa nos gusta testar todos los virus habidos y por haber.
2. Para quien no te conozca, eres madre de trillizos. Cada vez que lo cuentas, ¿qué te dicen?
Es curioso cómo todo el mundo reacciona de la misma forma. Primero me preguntan con los ojos como platos: ‘¿Pero, dónde los metiste?’, después quieren saber cómo sobreviví a los primeros meses (cualquier persona que haya sido mamá o papá, sabe de lo que hablo, pues imagina eso multiplicado por tres) y luego ya sí se atreven me preguntan si fue natural o no…
3. ¿Y cómo es tener trillizos? Porque pasásteis de ser una familia de dos a una de cinco casi de repente.
Es una locura maravillosa que sin duda transforma tu vida pero obviamente para bien. Ser madre es un sacrificio de tiempo, de energía, un sacrificio económico pues… es brutal. Pero, aún así, es difícil comprender que todo compensa.
4. Tanto a ti como al padre siempre os preguntan si fue un embarazo por FIV… ¿fue así?
Sí, es una pregunta recurrente y lo cierto es que no. Nosotros fuimos a buscar un bebé. Y sorpresa: tres. Ni FIV, ni vitaminas ni nada. Triple ovulación espontánea: tres óvulos, tres bebés.
5. ¿Cómo os enterasteis de que venían tres bebés? Esa consulta médica tuvo que ser…
En la semana 7 fui a revisión privada y mi ginecólogo estaba mirando y chequeando que estuviese todo bien. Yo observaba al médico mirar la pantallita inteligible y su cara se iba trasformando. Y me dijo la frase épica que aún resuena en mi cabeza: ‘Tengo algo que deciros y no sé cómo. Mirad, aquí hay una bolsa con un embrión, otra bolsa con otro embrión y una tercera bolsa con un embrión. Vais a tener tres bebés». Tras unos segundos de silencio, yo lo único que podía decir era… ‘No puede ser, no puede ser, yo no he hecho nada para que vengan tres’. Salimos de la consulta en shock, caminando por la calle en silencio y con mirada perdida. Sólo resonaba en mi cabeza ‘tres bebés’. En mi libro ‘Misstrillis, la aventura de ser madre (por tres)’ lo cuento todo.
![Noelia con sus tres pequeños](https://s2.abcstatics.com/abc/www/multimedia/familia/2023/08/30/noelia-1_20230830164210-U67624311611WmX-624x450@abc.jpg)
Noelia con sus tres pequeños
6. Al ser un embarazo múltiple, se cataloga siempre de riesgo. ¿Qué tal fue?
Sí, lo fue. Afortunadamente tuve un embarazo prácticamente perfecto. Me sentía fuerte, con energía y mucha ilusión. Los riesgos de que fuera mal son muchos. Te aconsejan que no adelantes excesivamente tus compras, por si acaso… Cada semana era un triunfo, pues cada semana que permanecían en mi barriga eran mayores posibilidades de vida para ellos.
7. Tuviste una amenaza de parto a las 30 semanas. ¿Qué pasó?
Una madrugada me sentía rara. Aunque llevaba algunas semanas con contracciones de Braxton Hicks, ese día me sentía diferente. Le dije al papá de ir nuevamente a urgencias, que seguramente no sería nada y que de vuelta desayunaríamos cruasanes en la cafetería de al lado de casa. Tras varias horas de correas y un tacto que me rozaron hasta el alma, me dijeron que estaba en trabajo de parto y que, si no lo parábamos en breve, nacerían los bebes. Se me cayó el mundo encima. Me sentía fracasada porque yo, que soy una persona tan positiva, jamás se me había ocurrido no llegar a la semana 34, en la que estaba programado el parto. Maduraron los pulmones por si acaso y con medicación lo paralizaron. Los cruasanes se hicieron esperar casi una semana.
8. Diste a luz en la 34. ¿Cómo viviste esas cuatro semanas?
Fueron las peores, por el miedo a tener una nueva amenaza de parto, por el cansancio y el peso de mi gran barriga. Sentí que la piel de mi abdomen se rompía. Lloraba de dolor, literalmente.
9. Los bebés nacieron en torno a los 2 kg de peso, fueron prematuros, e imagino que fueron ingresados. ¿Cómo fueron esos días: los miedos, dudas, etc.?
Estuvieron ingresados 10 días en neonatos y una de mis hijas estuvo dos largos días en UCIN. Aunque sabes que tus hijos están en las mejores manos, es duro dejarlos allí. Estábamos en neonatos más de 14 horas al día y aún me faltaban horas. Sentía tener que separarme de ellos y encima tener que dividir mi tiempo entre los tres. Lo recuerdo de forma bonita pero con angustia. Al final era madre primeriza, no sabes muy bien cómo hacer, me templaban la manos cuando cambiaba un pañal, se me caían las lágrimas cuando lloraban…
10. Noelia, muchas veces vemos en redes sociales «cuerpos perfectos» al poco tiempo de dar a luz. Sin embargo, tú mostraste tu realidad. Cuéntanos, para quien no lo sepa, cómo se quedó tu abdomen tras dar vida a tres niños y cómo te afectó.
Mi abdomen quedó destruido. Una hernia umbilical, diástasis abdominal y hasta 20 centímetros de piel sobrante. Las marcas y las cicatrices que quedan en nuestro cuerpo tras un embarazo son recuerdos de vida y siempre acepté y amé mi cuerpo por encima de todo. Obviamente no te gusta y echas de menos quien fuiste. Sin embargo, como siempre digo, ser madre no solo te cambia el cuerpo sino también la mente y el corazón. Es decir, puedes amar y respetar tu cuerpo pero también querer mejorarlo y más si no es una cosa únicamente estética.
![Así quedó su abdomen tras el embarazo](https://s1.abcstatics.com/abc/www/multimedia/familia/2023/08/30/noelia-3_20230830164039-U04433080508Kai-624x450@abc.jpg)
Así quedó su abdomen tras el embarazo
11. Y decidiste hacerte una abdominoplastia, ¿no? ¿Por qué?
Porque quise reparar la diástasis abdominal y la hernia umbilical y también, por qué no decirlo, para verme mejor estéticamente.
12. Ahora que los peques tienen 4 años. ¿Cómo dirías que es ser madre de trillizos?
Me dicen que ‘lo peor ha pasado’ aunque creo que quien me lo dice aún no se ha planteado lo que puede ser una triple adolescencia (risas). Sí, ahora con 4 años son más autónomos, van al cole y se entretienen más. Cada edad tiene lo suyo. Mi vida sigue siendo una gran aventura diaria.
13. Con tanto gasto, ¿cómo lo hacéis?
Sí, tener tres niños no es barato. Los primeros años, entre pañales y leche de fórmula, llegaba un punto que era mejor no pensar. Por suerte, tanto su padre como yo siempre hemos trabajado y hemos podido afrontar los gastos. Pero sí, todo es triple y los gastos también.