El mundo del fútbol despide a uno de sus mayores mitos durante el siglo XXI. Gianluigi Buffon anunció ayer, con un breve vídeo, su retirada. Uno de los mejores guardametas de la historia dice adiós a la portería después de 28 temporadas resguardándola. «Esto es todo, amigos. Me disteis todo. Os di todo. Lo hicimos juntos», fue su mensaje de despedida. ‘Supergigi’ puede presumir de un palmarés a la altura de pocos: un Mundial, nueve títulos de la Serie A, una Europa League, una Ligue 1, seis Copas de Italia y 8 Supercopas. Pero su legado va más allá de los trofeos. Una forma de entender el deporte, una personalidad y un liderazgo que costará volver a encontrar en un futbolista de su categoría.
Buffon llegó al Parma con 13 años y en calidad de delantero. Pero las lesiones de los guardametas le llevaron a colocarse por primera vez bajo los palos. Quizá el fútbol perdió un goleador, pero a cambio ganó a un portero para la historia. Se enfundó los guantes y no los ha soltado hasta los 45 años. Con 17 subió al primer equipo parmesano y debutó en la Serie A ante el todopoderoso Milan. En seis temporadas, se proclamó campeón de la Europa League, además de levantar una Copa y una Supercopa.
En 2001, la Juventus desembolsó 54 millones de euros para hacerse con sus servicios. Una cantidad que refleja la categoría de Buffon, ya que se convirtió en el portero más caro de la historia. Durante su larga etapa en Turín, se convirtió en leyenda. Diecinueve temporadas en las que conquistó diecinueve títulos nacionales. Aunque hay uno por encima de todos ellos. 24 años después, Buffon fue uno de los máximos artífices de que Italia se volviera a consagrar como campeona del mundo en Alemania 2006. Los 176 encuentros que disputó con la ‘Azzurra’ le dejan como el italiano con más internacionalidades, un récord que será difícil arrebatarle.
Una de las pocas espinas que ‘Gigi’ no consiguió quitarse fue la Champions League. A pesar de ser capaz de disputar hasta tres finales, la máxima competición continental se le resistió.
Tras un breve paso por el PSG, regresó a la Juventus y, posteriormente, al Parma. El último objetivo de Buffon era retornar a la máxima categoría del fútbol italiano con el club en el que todo empezó. La decepción de no conseguir el tan ansiado ascenso junto a la complicada temporada que ha tenido debido a la lesiones, le han hecho dar un paso al lado. 28 temporadas plagadas de éxitos y un legado encomiable. Una leyenda en mayúsculas.