Si el mundo del fútbol no tenía suficientes temas de discordia con el arbitraje, el VAR, los tiempos añadidos o el ritmo de juego de los encuentros, el modelo de retransmisiones introducido por LaLiga para esta temporada ha sacado a la palestra uno nuevo: la presencia de cámaras en los vestuarios en los instantes previos a los encuentros.
Se trata de una de las novedades que ha introducido la patronal del fútbol español con el objetivo de mejorar el producto televisivo que llega a los aficionados en sus casas. Pausas de hidratación microfonadas, cara a cara entre los entrenadores y jugadores rivales, o entrevistas a los futbolistas al descanso son algunos ejemplos de ello.
Pero ninguna de ellas ha generado opiniones enfrentadas como lo ha hecho la grabación de las conjuras y arengas de los jugadores antes de saltar al terreno de juego. El encargado de abrir la veda fue Unai Simón. El guardameta del Athletic fue uno de los protagonistas de una de las imágenes de la primera jornada de liga, celebrada el pasado fin de semana.
Los espectadores del enfrentamiento entre el conjunto vasco y el Real Madrid pudieron visualizar a los ‘leones’ rezando un padrenuestro en los minutos previos al encuentro, una tradición histórica del vestuario del Athletic nunca vista antes.
Simón se mostró contundente sobre esta experiencia inmersiva para el aficionado: «Siempre he vivido el vestuario como algo privado. Los jugadores tenemos rituales o manías que no queremos que salgan a la luz. No me gusta, me siento incómodo. Es como nuestro momento sagrado. No soy nadie para decir que no entre una cámara al vestuario, solo doy mi opinión y creo que están invadiendo nuestro espacio».
Horas después, Javier Aguirre fue preguntado por esta cuestión y se mostró en la misma línea que el portero vitoriano. El técnico del Mallorca aseguró que «no todo vale con dinero, hay que priorizar cosas» y criticó que antes el ejemplo a seguir para el fútbol español era la Premier League, pero con las nuevas retransmisiones «parece que quieren hacer lo que hace la Kings League».
Sin embargo, no todas las opiniones son contrarias a estos cambios. Rubén Baraja, entrenador del Valencia, afirmó que es necesario «adaptarse a las posibilidades que ofrece el fútbol», un deporte que «no deja de ser un espectáculo». «Es llevarle al público cosas que son realmente especiales, son momentos íntimos y tu estás ahí y no eres capaz de controlar, y el aficionado va a ver cosas que no se ven habitualmente», mantuvo. El Pipo también reconoció que hay momentos que deben conservar su privacidad, pero se trata de un proceso en el cual lo irán «asumiendo y asimilando».
Otras competiciones ya tienen este proceso más que asumido. La NBA siempre se ha situado a la vanguardia en lo que a retransmisiones televisivas se refiere. La introducción de las cámaras en los vestuarios por primera vez llegó en 2007, de la mano de David Stern, comisionado que revolucionó la mejor liga de baloncesto del mundo. Y, actualmente, los micrófonos en jugadores y entrenadores durante el partido o los vídeos de las charlas de los técnicos antes del encuentro forman parte del día a día.
El tema se encuentra encima de la mesa y son los futbolistas, junto con los clubes, quienes dictarán sentencia sobre su continuidad en las renovadas retrasmisiones de LaLiga.